Santos Ruiz
Ca Pepico tiene una de las mejores bodegas de este país y uno de los sumilleres más interesantes de cuantos trabajan en él. Pep Ferrer tiene unos conocimientos bestiales. Pero sabidillos del vino hay muchos. Él, además, ejerce el oficio con firma propia. De la misma manera que un cocinero creativo se expresa en la cocina de una manera personal, él trabaja el vino de una forma diferente al resto de sus compañeros.
No ofrece lecciones, ni busca describir el vino y sus viñedos. Intenta relacionarse con el vino y con el cliente en un entorno de felicidad. Generar sensaciones placenteras sin aburrir con discursos. Junto a él, su hermana Ana despliega una cocina que parece sencilla, pero carga con la complicación de hacer bien las cosas.
Todo respira ese aire de cocina casera tan difícil de reproducir en un restaurante: el esgarraet, las croquetas, el arròs en fesols i naps… Y si quieren una paella valenciana de la huerta como mandan los cánones, pues también. Además, hay productito del mar y de calidad: gambas, buena sepia, calamar… Indispensable para los amantes del terruño. Así que pasen los años esta casa seguirá siendo una referencia fiel a la cocina valenciana de siempre gracias a la profesionalidad y el sentido de la familia Ferrer.
Critica publicada en la edición en papel del Almanaque Gastronómico de la Comunidad Valenciana 2020.
Paella marinera.