El restaurante Monastrell se convirtió en el epicentro de la celebración del 50 aniversario del Grupo María José San Román, una trayectoria que ha redefinido la gastronomía alicantina a través de creatividad, innovación, sostenibilidad y un profundo respeto por los productos alicantinos. Medio millar de amigos, clientes y colaboradores se reunieron en este evento que reflejó los valores y la excelencia del grupo.
La cocina contemporánea de autor del Monastrell, el producto de La Taberna del Gourmet, la parrilla mediterránea del Asador la Vaquería y los frankfurts y hamburguesas de Tribeca, el despacho de pan de María José San Román y el Huerto Terramón se dieron cita en una fiesta para celebrar por todo lo alto que cumplen medio siglo de vida.
Al frente del grupo está una María José San Román incansable, imparable, emprendedora, empresaria experta en aceites, en vinagre, en azafrán… En el restaurante Monastrell y en el despacho de pan que lleva su nombre, basado en fermentaciones lentas, sabores intensos y harinas ecológicas blancas e integrales, de calidad y de origen francés.
Geni Perramón está al frente de la Taberna del Gourmet, local abierto desde 1979 fusionando el mejor producto local con las recetas tradicionales.
En la ceremonia estuvo presente Jorge Perramón, de Terramón, el corazón verde que abastece al grupo y se basa en un modelo de cocina circular y sostenible. Y Raquel Perramón y su marido Gonzalo Infante, que ya vuelan solos con sus Pizzerías Infraganti.
No podían faltar en la celebración el patriarca, el deportista Pitu Perramón, jugador de balonmano, de la Divisón de Honor que ocupaba el puesto de portero y que fue apodado el “niño de oro del balonmano español”, que el Calpisa fichó y ganó para la ciudad donde tiene calle propia y se ha convertido en empresario.
La velada comenzó con la recepción de los invitados en un ambiente vibrante, amenizado por la música que marcó el tono dinámico y elegante del evento. En la planta baja, los asistentes disfrutaron de una exquisita selección de vermuts y aperitivos, ante la magia del violinista electrónico, Hervetviolin, que añadió un toque de sofisticación, combinándose con la música de la conocida DJ, María Arias. El cierre de la ceremonia estuvo a cargo de Anthony Blake, quien invitó a los asistentes a participar en una ruta gastronómica por las diferentes estaciones culinarias, cada una inspirada en los establecimientos del grupo.