
Carne de caza y quesos de producción propia en Tibi
Ángeles Ruiz
La finura de Ignacio Caro, apasionado chef que se ha forjada en prestigiosos restaurantes de España e Italia, como Aponiente, las Rejas y la Botica de Matapozuelos, se nota en sus creaciones.

Escabeche de perdiz, ragú de jabalí y croqueta
Para comenzar sirve una perdiz en escabeche, una croqueta de jamón sencilla pero y rica sabrosa y un buñuelo relleno de ragú de jabalí con confitura de higo, queso ahumado y morcilla de jabalí. Le sigue el plato titulado garbanzo huevo y torrezno donde nos parece ver la sombra alargada del gran Manuel de la Osa, chef del que Caro habla con añoranza y se declara admirador.

Garbanzo, huevo y torrezno
A continuación, llega la royal de apionabo un plato vegetariano sobresaliente. Montan la royal sobe un jugo elaborado con los recortes del apionabo, avellanas y vino amontillado de Jerez. Lo completa con toques de calabaza encurtida y crema de cebolla pochada lentamente en mantequilla.

Royal de apionabo y jugo de avellanas
La solidez culinaria de Caro se aprecia en platos como el guiso de boletus, con pipil, piñones y esparraguines de Villena.
La original versión del cochinillo, el único plato que no han cambiado en la carta desde sus inicios porque los clientes lo siguen pidiendo, y el chipirón relleno de un guiso tradicional de manitas de cerdo, nos remiten al lugar de origen de Caro, natural del pueblo abulense de Arévalo.

El cochinillo de Arévalo
De postre el que fuera en otro tiempo sucedáneo del chocolate, la algarroba, acompañado de miel y chocolate blanco.
La sala está a cargo de Carmen Navarro, arquitecta que cambio su profesión por los fogones. Ella elabora el pan y dirige el servicio con mano amable y cercana.
En la carta de vinos pone especial atención a las referencias de la zona, primando bodegas artesanas o con pequeñas producciones.
La relación calidad precio de los menús es excelente.
El restaurante toma el nombre prestado del manual de cocina Art Cisoria, el primer tratado gastronómico escrito en castellano por Don Enrique de Aragón, Marqués de Villena. Un tratado de protocolo, de urbanidad e higiene para los maestros carniceros y otros profesionales trinchantes del siglo XV.
Última visita 5/11/2025


